UN ENORME DESPACHO...

Un enorme despacho, al fondo una anciana arrugada, con algunos tatuajes en la cara estudia una serie de pergaminos, llaman a la puerta, y tímidamente un hombre corpulento, rapado, con varios tatuajes y una puntiaguda barba pelirroja pide permiso para pasar.

- ¿Milady me habéis hecho llamar?. He venido lo antes posible...-


- Eeeeh, ah si joven aprendiz ¿hay noticias de Ramuk?-


- No Milady, hace unas dos semanas que no ha contactado.-


- Mmmm, creo que ese grupo logró escapar de la zona maldita de los druidas, debemos acelerar los planes. Partirás ahora con mi sobrino.-


- ¿Vuestro sobrino? Milady se trata de una misión encubierta, creía que le enviaríais en el último momento, su afán destructivo...bueno puede dificultar nuestros planes.-


- No te preocupes Monty, está controlado, te reunirás con él y con su digamos...comitiva, debes asegurarte de que no se 'entretiene' demasiado por el camino. Yo me encargaré de distraer a las fuerzas de Rashemen, te necesito a su lado para que lleves un poco de juicio en su expedición.-


- Milady, siempre os he sido fiel, y siempre hemos triunfado, esta vez no será la excepción, se hará como decís, pero ¿qué ocurrirá si las tres brujas llegan a interrumpir el ritual?.-


- No llegarán a tiempo, descuida, lo tengo todo previsto, tu haz lo que te he dicho, sin dudas. Y no te enfrentes a mi querido sobrino, déjale hacer, si ves que se entretiene mucho, confío en tu juicio para meterle prisa, esta vez está en misión sagrada (eso es lo que cree él al menos, je, je) y no te causará muchos problemas.-


- Milady esta vez triunfaremos, se hará conforme habéis dictado.-


- Bien Monty, bien, je, je, je...esas brujas sabrán de una vez por todas qué significa la palabra MIEDO.-


La anciana se retira escoltada por dos enormes figuras que el hombre no sabe de dónde han salido, deja a Lord Montorus con sus pensamientos:

-'Espero que la vieja no se equivoque esta vez con su sobrino, es peor que la viruela, por donde pisa no vuelve a crecer la hierba...-