Una gran puerta llena de refuerzos y extrañas runas se abre,
surge un hombre corpulento con una barba pelirroja puntiaguda, varios tatuajes
en su cara y una elegante túnica roja. En su cara destaca una gran sonrisa y
corre por una serie de largos pasillos, se detiene frente a otra elegante
puerta de madera con refuerzos de bronce, llama casi sin esperar respuesta. Una
anciana, también con algunos tatuajes en la cara, levanta la cabeza de una mesa
llena de pergaminos, mapas y papeles.
-¿Monty?, imagino por
tu sonrisa y por tu impaciencia, que esta interrupción será por algo
importante...más vale que así sea.-
-Milady Cospedaar, no
vais a creer lo que he visto. Vigilaba a la bestia como me pedisteis, cuando el
grupo de poderosos aventureros apareció, la lograron tumbar con relativa
rapidez y eficacia, pero lo mejor de todo, se les ha unido otro elfo...-
El hombre muestra una enorme sonrisa de triunfo.
-¿Otro elfo?, ¿bueno y
que tiene eso de importante?-
- Milady, ese elfo es
el ¡infame Hook!, lo he reconocido por los carteles que hay por todo Thay, la
recompensa es muy alta mi señora.-
A la anciana se le ilumina la cara, sus ojos brillan con una
mezcla de codicia y maldad.
- ¿Hook? jajajaja,
jajajaja, esta si que es buena, esa rata traidora se acerca a nuestras manos ¿eh?.
Perfecto Monty, perfecto, la bestia es importante para todo el plan, pero esto
puede ser un muy bonito 'extra'.¿Y el resto del grupo?
¿Siguen con Hook?¿Dónde están ahora?-
- Milady, me temo que
mis dotes de espionaje mágico no son tan fuertes como las vuestras, los seguí,
pero no conseguí enterarme mucho de sus planes, Hook discutía fuertemente con
la elfa del grupo, y también parecía que había fuertes roces con el otro elfo,
el músico. Las discusiones fueron tan largas y a tan alto volumen que no
conseguí enterarme de lo que planeaban las magas con la Paladina. Lo último que
recuerdo, es como una de esas perras enmascaradas abría un portal y todo el
grupo lo atravesaba, pero no logré ver a dónde iban.-
-Mmm, ya veo, primero
parece que hay tensiones dentro del grupo, eso es bueno para nosotros, no lo
dudes, son poderosos, pero si tienen trifulcas entre ellos, sin duda eso les
causará al menos distracciones. Sin duda volverán a intentar parar a la bestia.
Bien, bien, deja que yo me ocupe del rastreo, y estate preparado...-
La anciana garabatea en un pergamino con rapidez, pone lacre
y lo marca con uno de sus anillos.
-Toma esto Monty,
prepara un fuerte grupo, están en la lista que te doy, avísales, y diles que
vengan a mi presencia, en cuanto yo de la señal deberéis partir donde yo os
diga.-
El hombre empalidece, y con una mano temblorosa toma la
carta.
-Milady, ¿de esas
palabras deduzco que yo también iré con el grupo de caza? No deseo poner en
cuestión vuestro asombroso intelecto, pero la perspectiva de enfrentarme a ese
grupo de nuevo, no me convence demasiado, necesitaremos muchos hombres, o gente
de gran poder, quizás si vos liderarais la expedición...-
-Vamos Monty, no digas
tonterías, mis huesos están muy débiles para realizar largos viajes y
enfrentarme con chusma, tengo cosas más importantes de las que ocuparme, y no
seas tan cobarde, te aseguro que reuniré un grupo de personas competentes para
ocuparse de ese grupo, y muy en especial de 'eso' que se hace llamar Hook. Ese
elfo escurridizo pronto tendrá el placer de recibir los honores que merece en
Thay. Marcha ahora, y no te retrases, si todo va bien, te daré la mitad de la
recompensa que se ofrece por el elfo.-
-Milady, sois tan
generosa, os lo agradezco, partiré de inmediato.-
El fornido hombre sale corriendo por donde ha entrado
pensando:
-'Maldita vieja, me
deja a mi los peligros mayores, ufff, enfrentarme a ese grupo pase, pero al
infame Hook ya son palabras mayores, espero que la chusma asignada sean buenos
en su trabajo.'-
Mientras la anciana hace un ligero gesto y las puertas se
cierran de inmediato. Sin moverse de su mesa sigue hablando:
- Bien, ¿qué piensas
querido?.-
De entre las sombras sale un fornido hombre, embutido en una
extraña armadura con cabezas de carnero en los hombros.
-Tía, Montorus es un
imbécil, cobarde e incompetente, deja que yo me ocupe del asunto, te traeré al
elfo y de paso arreglaré cuentas con esa perra seguidora de Tyr.-
-Je, je, je, no
querido, valoro demasiado tú vida y prefiero que de esto se encarguen algunos
'prescindibles', de hecho varios de los que pienso enviar espero que no
regresen. Tendrás tu oportunidad, pero no en esta ocasión, eso sí me harás un
favor, que te servirá en parte de venganza, en el momento preciso te llamaré y
espero que tengas preparadas algunas criaturitas que acompañen al grupo.-
-Mmm, bien tía, como
digas, pero dí a tus hombres que no toquen ni un pelo a la paladina, esa mujer
es mía. Marcho ahora a hacer algunos preparativos para lo que me has pedido, y
espero que parte de la recompensa vaya a mi bolsillo también.-
- No te preocupes
Nestor, espero que Montorus caiga en el enfrentamiento o vuelva mal herido, la
recompensa será para nosotros solos, ya le convenceremos de que es la mejor y única
opción.-
El enorme hombre hace una reverencia, y se marcha, dejando a
la anciana con sus pensamientos.
- Hook, al fin,
jejeje, esta vez no escaparás maldita rata, mis hombres te atraparán, y yo te
enseñaré por qué no hay que meterse con los magos rojos, espero que disfrutes
de tus últimas horas de libertad.-
La anciana baja la cabeza y vuelve a sumergirse en sus
pergaminos, papeles y mapas con una ligera sonrisa en sus arrugados labios.
